Iniciamos la Ruta de los Barrancos, junto al Pabellón Municipal “Carlos de Haes” de Jaraba, tomando el cauce del barranco de San Vicente.
Se asciende por una pista forestal por el lecho del barranco, rodeados por algunas viñas, campos de almendros, dejando a la espalda la silueta del pueblo. Se supera un primer dique y posteriormente otro completamente colmatado, en las proximidades de la paridera de las Aguzaderas.
Proseguimos el ascenso por el barranco, desviándonos a la izquierda por la pita de la Dehesa Boyal, en un paisaje de pinares de repoblación. Poco después otro desvió a la izquierda por otra pista, siguiendo los hitos hasta las ruinas de una paridera de la Losa Montero. El ascenso entre el romero proporciona unas maravillosas vistas del cerro redondo del Taragudo y de toda la extensión del pinar del municipio.
Caminamos por un sendero por terreno herbáceo entre campos de cereal y después un pequeño chaparral hasta las grandes cárcavas de arcilla, arenisca y conglomerado resultado de la erosión de la arroyada de los numerosos regueros que conforman el paraje de “El Rubial”.
Bajamos por la senda hasta el barranco de Sta. Águeda, cuyo cauce se estrecha y la llanura aluvial aparece profundamente erosionada, dejando a la vista una capa de sedimentos de más de dos metros de altura (gravas, arcillas y arenas), continuamos pasando por la orilla de dos diques completamente colmatados y alguna gran poza de agua excavada en el lecho fluvial, rodeados por el pinar.
Seguimos el descenso por un lecho de mayor anchura y nos desviamos por el camino de la solana para llegar al casco urbano de Jaraba, junto al peirón de santa Águeda